El servicio es muy bueno, la variedad de platillos bastante respetable y el lugar es acogedor. El único pero que le pongo es la poca variedad de platillos que no contienen chile u otro irritante, por lo que personas que no gusten de estos condimentos estén atentos a ese detalle. Fuera de eso, es un lugar muy recomendable para todos los que quieran probar algo diferente o simplemente quieran pasar un buen rato. Los precios son justos y la atención del dueño es sobresaliente.
le debía la reseña hace tiempo, en vida he visitado 6 veces el lugar y cada una de ellas ha sido experiencia inolvidable, la última vez un armadillo en salsa amarillita que fue sobresaliente...
Este restaurante realmente mantiene la tradición prehispánica, dándole no solo una buena presentación sino un sabor original que va mas haya de lo cotidiano. Con una amplia variedad de platillos inimaginables y una atención perfecta y desmedida por parte del reconocido chef, el cual ha sido visitado por el ya conocido gringo que viaja por el mundo probando de todo.