Hay tantas ofertas gastronómicas en la zona, que es difícil regresar a cada uno de ellos, pero Bistrot Arlequín es un lugar que siempre quiero regresar, el ambiente, la comida y el servicio son extraordinarios.
Buen sazón, buen servicio, buenos vinos, buen ambiente. Le faltan opciones al menú y a la hora de la comida entre semana se siente muy apretado y encerrado.