Zanaya

Hasta hace no pocos años, la propuesta gastronómica de los grandes hoteles era casi por obligación de estricta inspiración internacional, donde ofrecer cocina mexicana era impensable para otorgarle siempre los reflectores a cocina francesa, italiana o japonesa. Lo mexicano se reservaba únicamente para el buffet de desayunos durante décadas. Ya no más.

Afortunadamente en estos últimos años hemos sido testigos de cómo los hoteles buscan ofrecer un pedacito de México en su mejor versión posible: a través de nuestra brillante gastronomía. Un ejemplo de ello es la apertura del restaurante Zanaya en el remodelado Four Seasons Ciudad de México, a través del cual el huésped y el comensal pueden disfrutar de lo mejor de la cocina nayarita en un solo sitio.
Para los que no estén tan familiarizados con la cocina del estado de Nayarit basta decir una palabra: zarandeado. Es la cuna de tal preparación que enamora al primer bocado. Es por ello que el hotel invirtió en recrear el icónico sistema de cocción para incorporar una zaranda a la cocina del restaurante y poder ofrecer ese sabor único en numerosas preparaciones. El joven chef Tonatiuh Cuevas es quien se encuentra al frente de la noble tarea.
De entrada recomendamos no perderse los aguachiles de callo, camarón y pulpo. Y guarda mucho espacio para el mejor pescado zarandeado que comerás en tu vida —puedes pedirlo al ajillo o con cerveza y limón—. Se trata de un sabor tan único y característico que no podrás olvidarlo, sobre todo las quesadillitas zarandeadas de queso y frijoles que a nosotros nos parecieron espectaculares. Hasta la salsa es una verdadera delicia, quieres llevártela en un frasco y echársela hasta los choco krispies en tu casa de lo buena que está.

Por cierto, no olvides pedir los tragos de la casa creados por el bartender francés Mica Rousseu del bar Fifty Mils quien goza de gran fama mundial por ser ganador frecuente en diversos concursos de coctelería. No te vayas sin pedir de postre el plátano zarandeado, es una joyita de simpleza y sabor ahumado que te hará sentirte en alguna playa de la Riviera Nayarita mirando el atardecer. Garantizado.